viernes, 24 de septiembre de 2010

A rocio en una mañana de Septiembre

Que he de decirte
cuando yo no puedo amar como aman en las novelas,
como insisten que da amarse,
como dicen que ya esta establecido;
Yo amo tu pie desnudo
o la forma en que te paras mientras cocinas,
Te amo no desde el primer día,
pues no creo que alguien pueda amar así como así
aquello que al principio solo le atrajo.

Mi amor por ti fue paulatino,
caminando lentito,
y no siempre hacia adelante
por que hubo días donde te aborrecí
o te odie de manera sorda,
y pensé que lo tuyo y lo mió,
ya por ti o ya por mi,
se podría ir al carajo.

Pero pasamos la prueba
y aun que no pueda amarte como en las novelas,
te amo con toda mi mugre,
con toda mi sangre,
con mis manos abiertas y vacías,
con mis necedades,
con mi tacto,
con mi sexo,
con mi oído distraído,
con mis groserías a flor de labio,
con mi risa incomoda,
con mi panza de borracho,
y con este cerebro
que parece en ocasiones querer salirse del cráneo;
Te amo con todo lo que tengo,
con todo el compromiso,
con todo el corazón,
con todo yo,
sin reservas,
para ti,
para contigo.

No hay comentarios: